Un nutrido grupo de trabajadores despedidos de PepsiCo junto a dirigentes de partidos de izquierda –entre ellos MST, PO, PTS– enfrentaron a la Policía de la Ciudad al llegar al Congreso de la Nación, hasta donde se movilizaron para reclamar contra los despidos y el cierre de fábricas.
Luego de algunos minutos de gran tensión, lograron cruzar el vallado policial y se instalaron frente a uno de los ingresos sobre la avenida Rivadavia, lo que obligó a que los diputados ingresen al Parlamento –donde hoy se discute la expulsión de Julio De Vido– por una puerta alternativa.
Los manifestantes buscan que les garanticen la continuidad laboral a los empleados que fueron desplazados luego de que la compañía decidiera cerrar la planta para trasladarse a Mar del Plata.
La empresa les ofreció a los trabajadores una indemnización que duplica lo previsto en la Ley de Contrato de Trabajo. El 80% de los trabajadores aceptó la propuesta. El 20% restante tomó la planta y fueron desalojados por la Gendarmería el 13 de julio.
Leandro Gómez, delegado de PepsiCo, explicó que presentarán un proyecto de ley por la reapertura de la planta y la reincorporación de los trabajadores.




