Ramón M. llegó a una audiencia imputativa acusado de golpear en el rostro con un rastrillo a su pareja y madre de los hijos que tienen en común.
Fue el sábado a la tarde en la zona noroeste de Rosario, cuando el sospechoso fue detenido por la policía después de la golpiza y de amenazar de muerte a la mujer delante de los uniformados. El relato de los hechos lo hizo la fiscal María Lagar, quien pidió que Ramón M. quedara con prisión preventiva, a lo que la jueza Mónica Lamperti accedió. La causa quedará en manos de la Fiscalía de Violencia de Género.
El sábado, pasadas las 16, Nadia estaba en la casa de una amiga tomando unos mates en la zona de Sorrento y Cullen. Estaba también con su hija más chiquita, de un año y medio, cuando llegó Ramón M., de 25 años, su pareja actual. Después de reunir los testimonios de algunas personas que presenciaron la situación, la fiscal dijo en la audiencia que lo primero que hizo Ramón fue arrebatarle a la nena de los brazos y le dijo que se fuera para su casa.
Nadia gritó y arrojó manotazos para recuperar a su hija, y recibió en el rostro un golpe de puño primero y con un rastrillo de hierro después. Estaban en la vereda y algunos vecinos vieron lo que pasó y avisaron a la policía.
Ramón M. quedó detenido en el momento en que verbalizó las amenazas contra la joven, con quien no están casados pero conviven desde hace siete años. Fue trasladado a la comisaría 20ª y allí permaneció hasta ayer a la mañana, cuando fue imputado por el delito de "lesiones agravadas en concurso real con amenazas simples".
Su abogado defensor, Maximiliano Special, definió la situación del sábado como una "pelea mutua" y una "simple discusión", pese a que en el momento en que se realizaba la audiencia la víctima seguía hospitalizada. También negó que el sospechoso hubiera amenazado de muerte a la joven, algo que, según dijo la fiscal, presenciaron los policías.