Hace un mes nos habíamos enterado por su cuenta de Instagramque Britney Spears tenía un nuevo pasatiempo: pintar. En la terraza de su casa y con ropa cómoda, la estrella pop liberaba su estrés con lienzos y colores.
Pero el hobbie de Britney se volvió algo más. En una subasta que se llevó a cabo en Las Vegas, ciudad en la que vive y da shows varias noches por semana, vendió su primera obra de arte por 10.000 dólares.
Aunque no muy elaborada, la pintura fue rematada por una buena causa. Todo lo recaudado fue a un fondo para ayudar a las víctimas del atentado de Las Vegas, que ocurrió el pasado primero de octubre y dejó 59 víctimas y 527 heridos.
¿Pero quien es el comprador de la obra? Robin Leach, un presentador de televisión, a cargo del programa Lifestyles of the Richs and Famous (Estilos de vida de los ricos y famosos). Se ve que en este 2017, le está yendo mucho mejor que hace diez años (cuando su carrera parecía haber tocado fondo).
