La madrugada del jueves Amanda Noguera, de 62 años, llamó al 911 porque su marido había tratado de matarla. Cuando la Policía llegó poco después a la casa de la localidad bonaerense de El Talar, en el Tigre, la encontró a ella todavía ensangrentada y a él con una cuchilla en la mano.
Ricardo Fosa tenía 73 años. No dio tiempo siquiera a que le tomaran declaración. Se hundió el cuchillo en el pecho delante de todos y murió mientras lo trasladaban al hospital de General Pacheco.
La mujer tenía varias heridas defensivas en los brazos y tuvo que ser asistida en el mismo centro médico donde murió su esposo.
Llegó con una crisis nerviosa y quedó internada en observación, aunque fuera de peligro.
La investigación quedó a cargo del fiscal Santiago Munilla, quien ya ordenó una serie de declaraciones testimoniales, entre ellas, la de los primeros efectivos en llegar a la escena.
