Momentos de verdadera tensión se vivieron ayer por la mañana en El Peligro, cuando un grupo integrado por al menos cuatro delincuentes entró en dos inmuebles de la zona, donde se hallaban tres familias de agricultores. Los ladrones redujeron y agredieron salvajemente a los presentes, entre los que se hallaba una mujer embarazada de ocho meses, para luego escapar con una suma estimada en 130.000 pesos.
Todo se inició cerca de las 2, en inmediaciones de calle 436 y 212, cuando los implicados irrumpieron violentamente en las fincas. "Entraron cuatro hombres armados, nos sorprendieron cuando estábamos durmiendo", relató Paco Llanos (57), dueño de una de las quintas asaltadas.
"Me dieron un culatazo en la cabeza y nos tiraron al suelo. Nos ataron con cordones de zapatillas. Además, nos taparon la boca con cinta de embalar y nos decían que no los miremos o nos iban a pegar un tiro en la cabeza. Yo me desmayé después, así que no recuerdo mucho", agregó Llanos.
Habiendo reducido a las víctimas, los malvivientes revisaron toda la casa y lograron llevarse un total de 30.000 pesos y otros objetos de valor. "Nosotros queremos seguridad y justicia, lo que pasó es lamentable", sentenció el hombre.
Cabe mencionar que, en ese momento, el damnificado se encontraba en compañía de su esposa y sus dos hijos, resultando el más joven de ellos herido de un machetazo en la espalda: "Lo lastimaron bastante. Lo llevamos al hospital pero por suerte ya está en casa", concluyó. Asimismo, el perro de la familia fue envenenado por los maleantes para lograr su cometido.
No conformes con el botín obtenido, los malhechores cruzaron al terreno de enfrente, donde residen otras dos familias en viviendas separadas. Allí viven un joven de 21 años, identificado como Erwin Zurita, su esposa, y otro quintero, de nombre Miguel Guerrero,quien comparte hogar con su madre, su mujer y dos hijas.
Este medio dialogó con Guerrero, quien aseveró: "Nos robaron todo lo que teníamos, el producto de nuestro trabajo. Sumando lo que recaudamos con Erwin y la jubilación de mi madre, se llevaron un total de 100.000 pesos".
Con respecto a cómo ingresaron a su inmueble, Miguel afirmó: "Saltaron el tejido y se dirigieron primero a mi habitación. Nos ataron con alambres, lastimaron a mi mujer y mis dos hijas chicas. A mi madre también la golpearon". En tanto, la víctima consultada comentó: "Además, agredieron a la esposa de mi compañero, que está embarazada de ocho meses. Afortunadamente, creo que no sufrió complicaciones".
De esta manera, botín en mano, los delincuentes se dieron rápidamente a la fuga, escapando en un automóvil que se encontraba estacionado en la esquina. "No estoy seguro si había más sujetos esperándolos allí", finalizó Guerrero.
Seguidamente, los efectivos del Comando de Patrullas La Plata, al mando del comisario Ricardo Astopini, acudieron a la escena alertados tras un llamado al 911. Una vez en el lugar, las autoridades tomaron conocimiento de lo sucedido e implementaron un operativo cerrojo por la zona, aunque el resultado fue negativo.
Asimismo, los oficiales de la comisaría Séptima, coordinados por el Juan Soler, tomaron intervención en la causa, caratulada como "robo calificado y lesiones", dándole comunicación a la Unidad Funcional de Instrucción en turno, del Departamento Judicial de La Plata, la cual avaló las diligencias.