Desde hace tres meses, Macri repite una palabra a diario: austeridad. Los gobernadores ya tomaron nota de los nuevos tiempos y los intendentes no quieren quedase atrás.
"La tarea ahora es seguir ordenando las cuentas, racionalizando el gasto. Ese es el quid de la cuestión: que no haya gasto innecesario o superfluo. Cada peso que se gaste, debe cubrir una necesidad concreta del vecino", le dijo a COOL 103.7 Julio Irurueta, uno de los hombres fuertes de Cambiemos en el Concejo Deliberante de La Plata, quien presidió la Comisión de Hacienda y Presupuesto el último año.
Garro aprendió las bondades de la prudencia desde el primer día cuando su equipo económico advirtió el millonario rojo fiscal heredado de la anterior gestión. Desde el Palacio Municipal destacan el rol clave de dos personas en esa transición: Pablo Gorosito (Secretario de Economía) y María Laura Márquez (Contadora General).
A partir de este año, el gabinete económico estará comandado por Horacio Prada, que viene de dirigir la Agencia Platense Recaudación. "En el Presupuesto 2018 se bajó un 30% la planta de directores y funcionarios, y el gran objetivo es recortar gastos innecesarios para hacer más eficiente el uso de los recursos", explicó el flamante funcionario a este medio.
El Presupuesto 2017 terminó con una deuda flotante menor a la pensada y eso le da aire al municipio para extender el gasto en algunas áreas que considera vitales para la gestión. Por ejemplo, Seguridad tendrá un incremento presupuestario del 63% respecto al año pasado y Convivencia y Control Ciudadano subirá un 58%. Espacios Públicos, Salud y Obras Públicas, por su parte, tendrán incrementos que orillan el 40%.
Desde el municipio especulan que con la restructuración de la planta administrativa y la limpieza del personal que no iba a trabajar (o sea, los famosos "ñoquis"), podría haber un ahorro que llegue al 20% del total de los gastos. El Presupuesto 2018 se fijó en 6.300 millones de pesos; por lo tanto, de acuerdo a la estimación que hace el gobierno local, habría cerca de 1.200 millones de pesos ociosos.
Allí, Garro podría tomar dos opciones: usar esos recursos para obras (manteniendo fija la deuda flotante proyectada) o utilizar esos fondos equilibrar definitivamente el presupuesto.
"Reducir el déficit fiscal es más fácil a nivel local que a nivel provincial o nacional porque no tenemos obligaciones de sostener escuelas u hospitales gratuitos, planes sociales, etc. Pero si vos achicas mucho el gasto local, no tenes obras en la calle o luminarias. El desarrollo de la ciudad queda mermado", explicó Irurueta.
Un presupuesto puede leerse en función de las áreas (Secretarías) más "beneficiadas" y las más "perjudicadas" por el reparto. Pero también es interesante analizar cómo se distribuyen los gastos por objeto. Por ejemplo, el gasto en personal del 2017 fue casi el 30% del total de gastos. Es decir, por cada peso que gastaba el municipio, 0.30 iba a parar a sueldos y contribuciones de la planta permanente y transitoria. No es poco.
Otra partida onerosa es la llamada "Servicios no personales", que contempla fundamentalmente el mantenimiento de plazas y parques y del arbolado, pero también la limpieza y fumigación. Para tener una noción de este rubro, el mantenimiento del espacio verde ocupaba alrededor del 20% del total de gastos anuales. De ahí se explica la importancia económica y política que toma la Secretaría de Espacios Públicos, que maneja una masa de dinero para nada despreciable.
Para Prada, los gastos en el 2018 tendrán eje en la seguridad, las obras de infraestructura provenientes del Fondo Educativo, el nuevo Código de Convivencia Ciudadano y la salud. En este último caso, hay que recordar que los municipios bonaerenses irán haciéndose cargo gradualmente del financiamiento del SAME.
EL ROL DE LA PROVINCIA Y EL DRAMA DE BERISSO
Desde hace varios meses, algunos intendente kirchneristas han puesto el grito en el cielo por una supuesta discriminación que hace la Provincia hacia los municipios donde no gobierna Cambiemos.
"Las obras hidráulicas se hacen en municipio de cualquier color partidario, no es algo arbitrario. Otra de las obras emblemáticas fue el Metrobus de La Matanza y todos sabemos que ese lugar no es afín a Cambiemos. Cuando uno se pone a hilar fino sobre el destino de los fondos, lo que se dice desde el justicialismo son meramente palabras", remarca Irurueta.
Según explicó Prada, La Plata recibe el 2.83% de los fondos que coparticipa la Provincia. Se trata de una suma importante para el presupuesto local, que también recauda fuertemente a través de las tasas SUM e Inspección de Seguridad e Higiene.
Pero en Berisso la situación es bien distinta. El intendente Jorge Nedela tiene dificultades para pagar los salarios municipales, que entraron en pie de guerra durante varias semanas. Desde la cartera económica platense descartan que esa realidad pueda replicarse en nuestra ciudad. "No hay ninguna dificultad para pagar los gastos del personal", afirman.
Según explican exponentes de Cambiemos de La Plata, en Berisso hubo un sobredimensionamiento de los empleados públicos que se hizo incompatible con la escasa capacidad de recaudación que tiene un municipio chico.
Si bien ese escenario está lejos en La Plata, Irurueta remarcó la importancia de que el Concejo Deliberante sea prudente en los gastos a la hora de proponer ordenanzas o programas.
"La mayoría de ellos fueron gobierno hace poco; saben que la gestión no es un barril sin fondo. Hay una restricción presupuestaria", subrayó.
E ironizó: "Sino es muy fácil: me paro en la puerta de la Municipalidad y le regalo un fajo de 10.000 pesos a cada persona que pase. O prometo que voy a poner un policía en cada casa. Hay cosas que no se pueden".
