Un joven de 19 años protagonizó un curioso robo en una casa de la zona oeste de la localidad. Para la policía fue fácil identificarlo porque el ladrón perdió un dedo que terminó enganchado en las púas de la reja de la vivienda.
El hecho ocurrió el sábado a la tarde cuando un hombre de 37 años volvió de almorzar a su casa de la calle Tripepi, entre las avenidas Blas Parera y Almirante Brown. Sin embargo, cuando estaba a punto de entrar se dio cuenta de que faltaba una garrafa de diez kilogramos que tenía guardada en su patio.
Al reconstruir los pasos que hizo el ladrón dentro de su jardín se llevó una sorpresa cuando llegó al final del recorrido. El hombre notó que había un peculiar objeto que sobresalía de las púas "antiladrones" de la reja que rodea la propiedad. En ese momento se acercó y pudo confirmar que se trataba de un dedo incrustado.
Según informó el diario local, los policías llegaron al lugar sin poder creer lo que habían escuchado por teléfono. En pocos minutos pudieron tomar las huellas dactilares del dedo del delincuente y dieron la alerta en la guardia de los hospitales de la zona. De esta manera se conoció que un joven con características parecidas se atendió en el Hospital René Favaloro de Villa Cabello. No obstante, cuando la policía llegó al lugar, el ladrón se había ido porque había sido dado de alta.
