Los manifestantes, muchos de los cuales tienen pecheras de la CTA, aseguran que no fueron censados y que, por lo tanto, no podrán acceder a los cursos y beneficios ofrecidos por el Gobierno porteño.
En un principio, los manteros cortaron la avenida Rivadavia, a la altura de la calle Cuzco. La Policía de la Ciudad, los desplazó para que liberen la avenida. Finalmente, se apostaron sobre la calle José León Suárez, donde exigieron la presencia de un funcionario del Gobierno de la Ciudad. Poco después, intentaron avanzar para cortar la General Paz, mientras la Guardia de Infantería de la Policía trata de impedirlo.
El conflicto se da después de que, el 12 de enero, les impidieron instalarse en las inmediaciones de la estación Liniers. Entonces, un censo oficial arrojó que había 733 personas quienes, a su vez, están en condiciones de hacer un curso de tres meses en la Federación de Comerciantes porteña. A cambio, recibirán un pago de $ 14.000 por mes durante esos 90 días.
Sin embargo, desde la agrupación Vendedores Libres hicieron su propio censo: se instalaron en la sede de la CTA de la calle Piedras y pidieron que se presenten los que no habían sido contados por el Gobierno. En dos días, se presentaron 230 que dijeron no estar censados.
Mientras tanto, fuentes oficiales confirmaron que en los próximos días, los 733 manteros censados comenzaran su capacitación en FECOBA.
