A una semana de que comiencen las clases la relación entre el Gobierno de la Provincia y los gremios docentes se tensó más.
A las negociaciones de las paritarias se les suma el cierre de escuelas del Delta y Rurales. Previo a la reunión del jueves, los gremios docentes denunciación que el Gobierno pretende cerrar 8 escuelas del Delta y 39 rurales.
En un país donde el sistema de educación público está tan degradado, donde cada año no se puede llegar a un acuerdo paritario, donde las escuelas se caen a pedazos o cierran, ¿cómo se trabaja para llevar a delante las clases con estas problemáticas?
¿Son los gremios los que debería garantizar las clases evitando un paro o el estado debe tener la responsabilidad de llegar a un acuerdo real con los sindicatos para que las clases comiencen a tiempo?
Durante la campaña, la Gobernadora Maria Eugenia Vidal había asegurado en todos los medios del país que un docente no debería ganar menos de 40 mil pesos. Actualmente un docente gana alrededor de 10. 000 pesos, que con el aumento que ofrece el gobierno bonaerense, en septiembre llegaría a unos 14 mil pesos, muy por debajo de la canasta básica familiar, que hoy ronda los 17 mil pesos.
Ante tal situación el ministro de economía salió al cruce y a explicar que la provincia no tiene recursos para ofrecer un porcentaje mayor al 15%: "Queremos que los docentes ganen más pero debemos respetar las necesidades económicas de la provincia. No queremos hipotecar el futuro porque la provincia tiene déficit", explicó el funcionario.
Pero entonces ¿Por qué prometer cosas que no se pueden lograr?, se preguntó Roberto Baradel luego de la reunión con los funcionarios y los distintos gremios.
Otros de los puntos que fastidió a los gremios, fue que el gobierno comenzará a poner el ojo en el presentismo de los mestros. Es que, según el Ministro, los números son alarmantes, y a través de un bono quieren incentivar a los docentes a que no falten más a clases.
"Empezamos a tener claro quién va a trabajar y quién no, y tenemos en claro quién usa las licencias y cómo las usa y qué médicos otorgan licencias truchas, por eso hemos empezado a hacer denuncias penales contra profesionales de la medicina", sentenció.
Y agregó que "el año pasado hemos pagado 19 mil millones de pesos en licencias".
Al cruce salieron los docentes, que expresaron que es perverso cómo el gobierno quiere negociar, castigando a docentes con problemas de salud.
Está claro que el gobierno busca reorganizar el sistema educativo, quizás no de la mejor manera. Un bono no controlaría el presentismo y tampoco atacaría el problema de que no haya docentes en las aulas.
Los índices son alarmantes, las intenciones del gobierno existen pero no serian consideradas por el sector gremial.
Y a esto se le suma, el cierre de escuelas del delta y rurales también forma parte de esta reorganización de la educación pública.
La cuestión consiste en ajustar aquellos establecimientos en donde no hay la cantidad de alumnos necesarios para mantener una escuela. Técnicamente se cerrarían establecimientos para agrupar alumnos en otros establecimientos cercanos.
En este sentido el subsecretario de educación, Sergio Siciliano, aseguró que "el Gobierno revisará todos los cierres de establecimiento e involucrará a los inspectores en el trabajo de revisión, y agregó que "ningún chico se va a quedar sin escolaridad".
Y detalló que "la reorganización se da porque 18 escuelas no tienen alumnos, 11 tienen un solo alumno y el resto menos de cinco.
Por su parte, los gremios metieron esta situación como un punto dentro de la discusión paritarias, además de las ya planteadas, como la infraestructura escolar y ausentismo.
Y esta dentro de este punto, porque detrás de cada cierre de escuela, no esta garantizado que esos profesores sean reubicados en otras instituciones, al igual que el personal de mantenimiento, que son parte del sustento de las escuelas.
A una semana de que comiencen las clases se siguen sumando problemas en torno a la educación en Provincia. La próxima reunión se deberá llegar a un acuerdo si realmente no se quiere llegar a un paro por parte de los docentes, que esperan que esa oferta sea mayor a un 15% con cláusula gatillo, además de debatir sobre el presentismo y la infraestructura escolar, temas muy importantes para empezar a consolidar y garantizar una educación de calidad para todos los chicos de la provincia.
