Karina Abregú, quien sufrió graves lesiones en el 50 por ciento de su cuerpo al ser prendida fuego por Gustavo Albornoz -al que había denunciado 15 veces por situaciones de violencia- fue apuñalada por dos sujetos que la abordaron en la entrada de una clínica ubicada en el partido bonaerense de Merlo.
Su hermana Carolina Abregú, aseguró que "se trató de un apriete" y relacionó el hecho con la denuncia que se radicó contra el policía que, por orden judicial, cumplía con la custodia durante las 24 horas desde hace tres años en la puerta de la vivienda de Karina y que a raíz de ello fue relevado de esa tarea.
Karina no se resistió e igual fue apuñalada. Después estuvo una hora y media esperando una ambulancia del hospital Eva Perón, que nunca llegó y la terminó auxiliando una amiga", dijo la hermana de la víctima, quien agregó: "Parece una burla que pongan al cuidado de una víctima de violencia a un violento".
Como consecuencia de todo lo sucedido, en las últimas horas Karina Abregú se encadenó en la puerta de la Municipalidad de Merlo luego de que Gustavo Menéndez se negara a atenderla. "no me muevo de acá hasta que me reciba el Intendente", señaló esta mañana la mujer que pasó la noche rodeada de policías.




