Es un chico de 21 años, que sacó una especie de daga para amenazar a las víctimas. Después quiso escapar, pero lo detuvieron.
Con una hoja cortante de 40 centímetros de largo, la sacó de la vaina y enseguida amenazó a la dueña del negocio y a su pequeña nieta de nueve años para robar un kiosco de Villa Argüello, en la Plata.
En eso estaba, ya metido en pleno asalto, cuando llegó la mamá de la menor e hija de la comerciante. La mujer, que fue identificada por la Policía como Rosa Ramírez (31), vio algo que le pareció por demás extraño: la puerta de la vivienda, donde funciona el local, sobre la calle 134 entre 68 y 69, estaba abierta.
Por eso apuró el paso y fue ahí que se estremeció al ver un extraño con un gran cuchillo entre sus manos.
El agresor estaba justo saliendo de la propiedad y hasta la tomó de la ropa para ingresarla por la fuerza, pero como Ramírez se resistió, forcejeó con él y, hasta empezó a gritar, el ladrón decidió darse a la fuga.
En ese momento, tras meterse en la finca, Ramírez encontró a la madre, Elena Sicha (61), y a su hijita con un trapo en la boca y maniatadas, destacaron los voceros del caso.
Los vecinos, que habían escuchado los gritos de Ramírez, salieron detrás del delincuente, que arrojó una mochila con algunos elementos de valor que había alcanzado a sacar del negocio, para poder acelerar el escape.
Sin embargo, no llegó demasiado lejos.
En el reporte oficial mencionó que los frentistas justo se cruzaron con una comitiva policial, a la que anoticiaron del hecho y que fue, en definitiva, la que logró capturar al sospechoso en 126 y 64.
Se trata de un chico de 21 años, con domicilio bastante cercano al kiosco: 67 entre 122 bis y 123.
