Ayer se desarrolló una sesión histórica del Consejo Directivo en la que por primera vez en más de 25 años el decanato de la Facultad dejará de estar en manos de la Agrupación Hoja de Roble. Se impuso como decano Juan Angel Basualdo.
"Es una lucha de los estudiantes para enfrentar las restricciones que pusieron en la carrera. Tenían una visión muy privatista de la medicina. Los estudiantes logramos aislarlos cada vez más", indicó a COOL 103.7 la consejera estudiantil Rocío Mereles.
Pero la gota que rebalsó el vaso fue la limitación que hubo para los nuevos graduados. Las autoridades impusieron una "práctica final obligatoria" que fue cuestionada por la mayoría de las facultades y la propia UNLP. "A partir de esa decisión, la Universidad le soltó la mano a la conducción", dijo Mereles.
"Los graduados luchamos con las prácticas finales obligatorias. Hoy son considerados médicos por el ministerio de Salud Nacional y Provincial, excepto por la propia facultad que no querían darle la firma del título", agregó.
Según adelantó, las nuevas autoridades les firmarán esos títulos y habrá una jura oficial.
Por otro lado, volverán a dictarse carreras como obstetricia, nutrición, enfermería y la tecnicatura en prácticas cardiológicas.





