El presidente Mauricio Macri reapareció en un mensaje grabado, desde el partido de Morón, para dar un mensaje de tranquilidad en medio de la negociación de la Argentina con el Fondo Monetario Internacional y la escalada del dólar. Acompañado por la gobernadora de la Provincia, María Eugenia Vidal, el mandatario defendió las reformas económicas que impulsó su gabinete y aseveró que el país "está lejos de una crisis como en el pasado".
Durante el anuncio por las nuevas obras para los servicios de Metrobus de Quilmes, Florencio Varela, Ruta 8 y Ruta 4, el jefe de Estado se refirió a los últimos días de turbulencia financiera y expresó que entendía la preocupación de la sociedad. Sin embargo, aclaró que es la primera vez que un gobierno "hace lo que tiene que hacer" y que "este es el rumbo".
"Venimos de una década de irresponsabilidad, de despilfarrar y ya sabemos a donde nos lleva la mentira y los atajos", aseveró el Presidente. En la misma línea, explicó que la gestión oficialista no buscará "recetas mágicas" que solo dan ilusión de tranquilidad.
Tras su reunión con los jefes de bloque del Senado en la Casa Rosada, Macri les pidió responsabilidad a los dirigentes y opinó que no se trata de una rivalidad entre Cambiemos y el peronismo. "La Argentina se divide entre los que queremos construir futuro y los que quieren destruirlo", expresó.
El lunes por la mañana, el Presidente encabezó una reunión de Gabinete con asistencia perfecta. A su vez, Macri decidió ampliar su mesa de decisiones: sumó a la UCR y tendrán reuniones semanales. Una de las vueltas más estratégicas fue la de Emilio Monzó, que ya había anunciado que dejará de presidir la Cámara de Diputados el año que viene. "Sos una persona valiosa", le había dicho Vidal en una reunión reservada.
