El vuelo FO 5433 salía del Aeropuerto Internacional Puerto Iguazú, en Misiones, pero tuvo que ser cancelado luego de que la cola del avión, chocara con la pista durante la carrera de despegue.
El daño fue una fisura en el casco de presión y por la información trascendida se pudo saber que el avión está en muy malas condiciones. Además, autoridades explicaron que no puede ser arreglado en el país porque no hay nadie con el certificado de Boeing para hacerlo.
De acuerdo a los expertos, por la avería que sufrió la aeronave no se la puede solo "emparchar". Para arreglar el avión tienen que desarmarlo, reemplazar todo lo que está golpeado, probarlo al menos tres veces, re-certificarlo apto para volar y recién ahí volver a ponerle todos los asientos y demás, para finalmente entregárselo a la aerolínea.
Por el accidente se manejan dos hipótesis: una mala distribución de la carga de la bodega o bien que el piloto haya imprimido demasiada potencia a los motores al momento del despegue, provocando lo que en la jerga se llama tailstrike.
En tanto, la empresa emitió un comunicado en el que habla de "falla técnica" y resalta que la maniobra se realizó "cumpliendo con los protocolos de seguridad establecidos para este tipo de situaciones". Además informa que la compañía "se encuentra analizando de manera urgente y rigurosa las causas del hecho".
