Un matrimonio y sus dos hijos menores, fueron víctimas de una brutal entradera el domingo a la mañana, cuando desconocidos ingresaron por la fuerza en su casa, golpearon al padre y escaparon con diferentes elementos de valor y el auto familiar. Fuentes de la pesquisa informaron que el asalto ocurrió en 57 entre 26 y 27, cuando todos los moradores dormían.
Sospechan que para entrar al terreno saltaron la medianera que separa el inmueble de la calle, para luego forzar la puerta de entrada al mismo. Una vez que los delincuentes estuvieron dentro, se dirigieron primero a las habitaciones para reducir a los adultos y después a los niños.
Ninguno de los damnificados ofreció resistencia, pero ese no fue impedimento para que uno de los intrusos golpeara repetidas veces al dueño de casa.
Mientras les exigían que revelaran dónde "había plata", los ataron de manos. Con la situación controlada, se dedicaron a revisar cada rincón en busca de objetos y dinero en efectivo.
Así fue como se hicieron con una suma no determinada de billetes de moneda nacional y extranjera, electrodomésticos y otras pertenencias.
No obstante, eso no fue todo, porque al momento de abandonar la escena decidieron llevarse consigo el vehículo, un Honda Fit blanco. Cuando los ladrones se fueron, una de las víctimas pudo liberarse y dar aviso a las autoridades.
La mujer, de 37 años, tuvo que ser asistida en el lugar porque se encontraba con una crisis nerviosa. En tanto, su marido (36) fue socorrido por una ambulancia del SAME.
