Las reservas internacionales del Banco Central sufrieron las presiones que generó el intento de "reperlar" la deuda argentina: el "rescate" de los Fondos Comunes de Inversión que tenían letras en dólares, la intervención en el mercado de cambios y el persistente goteo de los depósitos en dólares de los ahorristas. Así, en un sólo día bajaron u$s 1943 millones, para terminar el mes en u$s 54.098 millones.
La fuerte caída de este viernes se correspondió con el pago de u$s 1279 millones del vencimiento previsto de Letes. Además el Banco Central intervino en el mercado de cambios con cinco subastas por un total de u$s 387 millones.
Sólo en agosto se perdieron más de u$s 13000 millones en reservas, aunque claramente la salida se aceleró luego de la derrota del macrismo en las PASO. Desde el lunes 12 de agosto, donde los activos argentinos tuvieron la peor baja para un día en la historia, se fueron u$s 12711 millones del Banco Central.
La sangría de Reservas es un tema que preocupa tanto en el Gobierno como en el sector privado. De hecho, en la conferencia de prensa del miércoles pasado, el Ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, aseguró que el paquete de medidas presentados, que incluían estirarlos plazos de los títulos que vencían este viernes y presentar en el Congreso un proyecto para avanzar en elreperlamiento de la deuda argentina buscaba "brindar al Banco Central todas las herramientas necesarias para garantizar la estabilidad cambiaria y financiera.