Cuando una persona fallece, las redes sociales se hacen eco de eso y comienzan a funcionar de una forma distinta. Según un estudio de la Universidad de Oxford, Facebook tendrá más usuarios muertos que vivos en 2069 y esto ocurriría de manera similar en otras redes sociales como Twitter o Instagram.
Una vez que una persona muere, alrededor del mundo existen millonos de criminales que aprovechan las cuentas desiertas para realizar acciones de, por ejemplo, supresión de identidad.
Ahora bien, ¿qué pasa con Facebook, Twitter e Instagram una vez que el usuario muere?
Facebook
En esta red social, el usuario puede decidir si quiere que se conserve su perfil como una página conmemorativa o si desea que se elimine una vez se notifique sobre el fallecimiento.
En este caso, los perfiles conmemorativos no aparecen en espacios públicos y conservan los contenidos que compartió el propietario de la cuenta antes de morir. Si se desea, es posible elegir que los contactos puedan o no publicar en la biografía.
Instagram
En el centro de privacidad y seguridad, el usuario puede establecer si desea que su cuenta se conserve como un recuerdo o que se elimine después de su muerte.
La solicitud para dar de baja la cuenta debe hacerla un familiar o representante legal, que deberá contactar a la empresa y enviar documentos que prueben la muerte del usuario, su identidad y su relación. Los perfiles in memoriam dejan visibles los contenidos previamente publicados y no permiten que terceros inicien sesión ni hacer modificaciones.
Twitter
"En ningún caso podemos proporcionar acceso a la cuenta a otra persona, independientemente de su relación con el fallecido", aseguran desde la red social.
Cuando un usuario muere, Twitter pide que una persona autorizada compruebe que el usuario ya no está vivo, presentando el acta de defunción y otros documentos vía correo electrónico.




