El viernes 16 de agosto, las autoridades del Ministerio de Salud de Rio Negro comenzaron a recibir la información de un contagio masivo que afectó principalmente al turismo estudiantil que viajó a Bariloche con motivo de su egreso escolar. Son más de 850 casos y el virus logró ser identificado en una gran porción de adolescentes.
Los estudiantes comenzaron a sentir malestar durante las semanas posteriores a la fecha mencionada. Náuseas, vómitos, diarrea y, en contados casos, fiebre. Comenzó siendo una incógnita y una preocupación que afectó a un número cercano a los 700 egresados y al resto de la población barilochense.
En las últimas horas, desde la cartera de Salud rionegrina detallaron que se trata del Norovirus, que produce "una enfermedad infectocontagiosa, que se manifiesta fundamentalmente con vómitos, náuseas, diarrea, y en algunos casos fiebre. Se propaga en los lugares donde la gente se reúne o se sirven alimentos".
Respecto a la procedencia del brote, los primeros estudios descartaron que estén vinculados con el agua del cerro Catedral o alimentos en mal estado. La transmisión masiva se habría dado de "manera fecal oral, por falta de higiene en las manos o posible manipulación de alimentos con las manos sucias"
Ante los casos de gastroenteritis, Salud Pública emitió una serie de recomendaciones para prevenir el contagio. Además de recordar las normas de higiene personal, extremar el lavado de manos con agua y jabón después de ir al baño y antes de comer, pidieron no consumir alimentos que no estén bien cocidos, lavar bien las frutas y verduras que se consumen crudas y no consumir comidas recalentadas.
También se recomendó tomar agua potable, no consumir agua de arroyos, ríos o lagos, ventilar diariamente los ambientes durante tres horas, evitar el contacto con materia fecal, vómitos y saliva de personas afectadas. Ante el agravamiento del cuadro se debe consultar a un médico.
