Otra marcha atrás de Jair Bolsonaro en su relación con la Argentina. El presidente de Brasil ahora decidió que tampoco enviará su vicepresidente a la asunción el 10 de diciembre de Alberto Fernández.
Bolsonaro avisó que no viajaría a Buenos Aires para presenciar la llegada del líder del Frente de Todos a la Casa Rosada. Sin embargo, el sábado moderó su discurso al decir que un funcionario suyo podría estar presente: "Si alguien quiere ir, es sólo hablar conmigo".
Luego, incluso, el presidente de Brasil informó que el elegido para representarlo en la Argentina sería su vicepresidente, Hamilton Mourão, un general retirado del Ejército, como el propio Bolsonaro, pero con rango de capitán.
Ahora, el jefe de Estado brasileño mandaría a un ministro para la presenciar la entrega del bastón de mando del presidente saliente Mauricio Macri -con quien tenía afinidad política- hacia el electo Alberto Fernández.
La relación de Bolsonaro con la Argentina y particularmente con el presidente electo no es buena. Este miércoles también aseguró en Twitter: "MWM, fábrica de motores americanos; Honda, gigante de automóviles, y L'Óreal, anunciaron el cierre de sus fábricas en Argentina e instalación en Brasil".
Dichos que fueron negados por los lideres de las empresas.
