Anoche, decenas de personas que habitan Claromecó, una de las playas del partido de Tres Arroyos, al sur de la provincia de Buenos AIres, salieron a la calle a pesar de la cuarentena para repudiar el comportamiento del
Decenas de personas salieron a la calle durante la noche del lunes, a pesar de la cuarentena, para repudiar la actitud del hijo de un fiscal que había llegado recientemente de Brasil.
Todo ocurrió porque los vecinos quisieron impedir que el hombre se instalara en su vivienda de Claromecó tras haber arribado de Brasil. Por eso las personas se cogregaron a su llegada y lo recibieron con insultos y bocinazos.
En este sentido, y tras la protesta, renunció el delegado del Ente Descentralizado de Servicios Turísticos, Carlos Avila, quien les pidió a los vecinos que se fueran del lugar: 'Por favor, no los molesten más, chicos. Les voy a explicar la situación: el chico fijó su domicilio acá porque es la casa del padre. Está todo legal. El único que se sintió culpable fui yo'.
Además, otro problema surgió cuando los efectivos quisieron llevar al joven hasta el primer lugar donde se alojó tras regresar de Brasil, en la ciudad de Tres Arroyos: 'En esos momentos, los vecinos de dicha localidad también salieron a las rutas a quemar gomas y cortar los accesos para impedir su ingreso', comentarios medios locales.