Todavía no se tiene una dimensión cabal de cuál será el efecto económico de la cuarentena en términos estadísticos. El último dato oficial de actividad económica es de marzo e indica que la caída fue del 11%.
Distintas consultoras proyectaron que la caída en abril y mayo sería del orden del 20%, teniendo en cuenta que allí la cuarentena fue en la totalidad del mes. Se esperan desplomes históricos del comercio y la industria manufacturera, los dos sectores que más impactan en el índice oficial.
LAPLATA1.com accedió al informe de una consultora que estimó cuál es el impacto de cada mes adicional de cuarentena. El resultado es una caída del 3% del PBI por cada 30 días de aislamiento obligatorio.
Por ejemplo: si la cuarentena se extiende durante todo junio, la caída será del 10% anual. Si abarca también el mes de julio, la caída sería del 13%. Para tener una dimensión: la caída del 2002 fue del 10%. Por lo tanto, una extensión desmedida de la cuarentena implicaría empeorar esa marca.
Durante la gestión de Macri, tres años terminaron en recesión: 2016, 2018 y 2019. En los tres casos fue una caída aproximada del 3% justamente.
Hay otro elemento que podría empeorar el pronóstico de caída de la actividad económica. El informe estima que la actividad económica se recuperaría a la misma velocidad ya sea que la cuarentena se levante en junio, julio o agosto. Y eso no contempla un punto clave: una extensión de la cuarentena podría herir de muerte a muchos comercios y actividades, y por lo tanto su recuperación sería inexistente si se levanta la cuarentena ya que estarán cerrados.
Por lo tanto, extender la cuarentena en términos económicos implica una caída en el presente, pero también lesiona la posibilidad de una recuperación más instantánea en el futuro.
