Priscila fue abusada sexualmente por su padrastro cuanto tenía 8 años. Vivía con él y su mamá. Después de reiterados abusos se liberó y contó su vivencia para radicar la denuncia en la justicia. Pero nadie la ayudó, no le brindaron soluciones.
Hoy, con 22 años, vive una lucha constante y gracias al acompañamiento de su familia se mantiene en pie y pide a gritos ser escuchada y que finalmente se haga justicia.
Su papá, Enrique, habló con LAPLATA1.com y precisó en detalle la terrible historia que vivió su hija. "Priscila manifestó que a los 8 años fue abusada por él; le mostraba revistas pornográficas; se masturbaba delante de ella y un día mi nena se despertó y tenía su miembro en la boca y la violó. La denuncia está radicada en la UFI. Como padre me duele mucho contar esto, pero es la verdad, la cruda verdad. Hoy mi hija tiene 22 años y siguió sufriendo acoso por parte de él porque pretendía ir a la casa de la madre; finalmente lo denunció, pero sigue todo igual".
En ese sentido, Enrique agregó que "no sé qué está esperando la justicia, que viole a otra chica o que mate a mi hija. Él me llamó, y nunca me negó lo que había hecho con mi hija. Se encontraba dolido porque lo escraché en las redes sociales, pero nunca se defendió de lo que hizo".
Asimismo, remarcó que "él (José Fernández) vivía en San Carlos y se escapó a Romero; ayer nos enteramos que está residiendo en la casa de una de sus cuñadas en El Retiro y como la justicia no hace nada, queremos avisarles a todos los padres que cuiden sus hijos, porque este hombre está al acecho y no sabemos quién puede ser la próxima víctima".
