Hace ya varios días que el local gastronómico de los hermanos Leuzzi fue atacado por los vecinos platenses, por abrir sus puertas al público por más que la actividad no esté habilitada.
La respuesta por parte de la Municipalidad de La Plata fue nula. No sólo no se clausuró el restaurante, sino que esta mañana volvió a recibir gente y los ciudadanos platenses están furiosos.
Los demás locales deben amoldarse a los tiempos que vivimos debido a la pandemia del coronavirus, pero se ve que para la Municipalidad ser grandes empresarios significa poseer impunidad.
En un momento donde la ciudad se encuentra en una meseta muy alta en cuanto a los contagios, donde ya se superó la barrera de los 10 mil infectados, se supondría que debería ser cuándo más responsabilidad se debe tener, ¡pero no! Masse sigue abierto y nadie hace nada.
