La problemática de los padres, madres o abuelos impedidos de ver a sus niños por medidas judiciales sigue creciendo en el país. La pandemia lo agudizó por el freno y las demoras en el sistema judicial.
Casi siempre se origina por el mismo motivo: denuncias falsas que efectúan el padre o la madre, y que imposibilitan a la parte denunciada poder ver a sus hijos.
En La Plata, Edith es una abuela de 70 años y lleva cuatro años sin ver a su nieto.
“Hay miles de casos de abuelos impedidos de ver a sus nietos. Esto es maltrato infantil. Esos niños tienen que tener una infancia compartida para ambos papás, y ambas familias. La felicidad de los niños está en relacionarse con ambas familias. Luchemos por la felicidad de los niños”, dijo Edith en diálogo con LAPLATA1.com.
Ella prefiere no dar muchos detalles de su caso. Entiende que lo importante es visibilizar la problemática. Al pequeño no lo puede ver ella ni su pareja de 78 años, y tampoco su hijo, sobre quien pesa la denuncia.
“Muchas veces se da que un niño tiene 8 años y dice que no quiere ver a sus abuelos. Esos niños hace por ahí 4 o 5 años que están en un hogar donde se habla mal del papá o la mamá no conviviente. Entonces ellos creen que eso es la verdad. Pero no es así”, comentó.
“Hay que explicarle que la otra parte no vive más a su lado por problemas de los grandes. Hay que velar por ellos, para que pueden ver a su otra familia“, agregó Edith.
Sobre su caso, Edith señaló que “hace cuatro años que, con intermitencias, no vemos a nuestro nieto. Tuvimos un régimen de visitas. A lo sumo lo vimos un mes, algunos sábados. Pero después unilateralmente nos han impedido de verlo”.
Edith lamentó las demoras judiciales. “Hay apelaciones, fallos que no se cumplen, todo se va dilatando”, consideró. “Pero lo importante es velar por todos los casos, no solo por el propio”, completó la abuela.
