Dos jóvenes fueron brutalmente atacados por una patota a la salida de una fiesta en Villa Elisa. Las víctimas de esta agresión fueron Franco Arancibia y Santiago Díaz.
En total actuaron 10 jóvenes, pero solo uno está detenido. Su familia pide justicia y que esto no quede impune.
Según el relato de Franco, “fuimos a una joda invitados por un chico, y otro grupo de chicas empezaron a buscar quilombo. Nos robaron la gorra y los tragos”.
Pero eso fue solo el comienzo del calvario: “Cuando nos quisimos ir nos estaban esperando, y le empezaron a pegar a mi amigo. Intenté separar y ahí me dieron un botellazo y me partieron el labio y la frente”.
Según relató el joven, echaron a correr y llegaron hasta el Camino Belgrano. Los sujetos los siguieron y continuaron las golpizas pero justo arribó la policía.
David, por su parte, indicó que lo hirieron con un cuchillo y cuando se agachó a tocarse la herida, empezaron las patadas y las piñas. “Fue una cacería”, aseguró.
En ese sentido, dijo que no conocen a los agresores ya que solamente fueron a la fiesta por la invitación de un chico.
Por otro lado, se informó que el único arrestado afrontará una causa por el delito de “lesiones”, y ahora la tarea de los pesquisas está abocada en dar con el resto de los involucrados.
