El Gobierno nacional confirmó que los maestros que prefieran no recibir la inmunización del COVID-19 tendrán la posibilidad de continuar en las aulas de forma presencial, siempre y cuando se respeten los protocolos sanitarios. "Si un docente no se quiere vacunar, va a poder seguir en el aula", expresó el ministro de Educación, Nicolás Trotta, y agregó que "hay que fiscalizar el cumplimiento de los protocolos en todas las escuelas, que es lo que permite un regreso seguro".
De esa manera, explicó que quien no se quiera aplicar la dosis seguirá asistiendo a las escuelas y pidió que cada comunidad educativa "haga reclamos si no se cumplen los protocolos, y si recibimos denuncias de que no se cumplieron los protocolos, vamos a intervenir".
El funcionario remarcó además que la semana que viene comenzará la vacunación de los trabajadores del sector de todo el país. "Con la llegada de las vacunas de origen chino, que se usan para menores de 60 años, se decidió priorizar a los docentes de educación inicial, la especial, los del primer ciclo de la escuela primaria y directivos, que son unas 450.000 personas, a partir de la semana próxima", detalló.
En ese marco, explicó que el Consejo Federal de Salud "definió cómo se iba a iniciar el proceso de vacunación de docentes en todo el país" y precisó que "son 1.450.000 personas (las que tienen que ser inoculadas), entre maestros, profesores, personal no docente y auxiliar, desde los jardines maternales hasta la educación superior".
"En estas horas estamos en la tarea de fortalecer toda la logística para comenzar en las 24 jurisdicciones la vacunación", añadió Trotta y puntualizó que los docentes deben anotarse para recibir la vacuna. Además, dijo que hay distritos, "como la Provincia de Buenos Aires, que ya tienen una página web, donde se anotan y marcan que son docentes" y concluyó: "Vamos a estar presentado un sistema de inscripción online, que ya está listo y que convive con aquellas jurisdicciones que tienen sus propias listas".
