Liz es platense, estudia en la Facultad de Trabajo Social de la UNLP y desde hace un mes pone su propia casa para reforzar los aprendizajes de muchos chicos de bajos recursos.
Ella vive en 165 y 527, en Melchor Romero. Pero no solo brinda estas clases de apoyo, sino que también tiene un comedor llamado “Libertad y Esperanza”.
“Hace un mes más o menos empezamos con esta iniciativa después de ver que algunos amiguitos de mi hija que ya estaban en segundo o tercer grado no sabían ni siquiera el abecedario. Les comenté a algunas vecinas y compañeras de trabajo qué les parecía y la verdad les gustó mucho la idea”, dijo Liz a LAPLATA1.com.
“Le estamos poniendo el pecho a esta situación y hoy damos estas clases a 12 chicos”, cuenta.
Y agrega que “por ahora no podemos ampliar porque no tenemos las herramientas necesarias para llegar a más chicos. El espacio es en mi casa, así que también le preparamos antes de que se vayan”.
Liz está muy contenta con la iniciativa. Ya nota un progreso en los chicos. La mayoría asiste una vez por semana, pero también tienen el caso de una niña que no consiguió escuela. Debería estar cursando el primer grado.
Y completa la joven universitaria con un pedido a los platenses: “Para poder seguir con la escuelita necesitamos útiles para los chicos, materiales didácticos, un pizarrón, mesas y sillas ya que cada vez son más los chicos que quieren sumarse”.
Para poder colaborar, deben contactase al 221 595 1156.
