En estas últimas dos semanas de campaña Julio Garro parece decidido a seguir una estrategia de no involucramiento en la interna local que se libra entre el PRO y la UCR.
El intendente no está de acuerdo con el accionar de los “paladares negros”, el grupo comandado por ex viceintendente Fernando Ponce, que recientemente protagonizó un escándalo cuando agredió al radical Ignacio Gando en pleno centro platense.
Además, este grupo también está involucrado en el recorte de los carteles de Facundo Manes, un hecho que llegó a los medios nacionales y lesionó la imagen del Intendente.
Desde el radicalismo creen que, lejos de atemorizar a la tropa radical, esta situación envalentó a los correligionarios. Esto quedó reflejado en la recorrida de Manes por calle 8, que superó todas las expectativas. “La gente se solidarizó con él, quedó como una víctima”, dijeron desde la UCR.
Lo concreto es que Garro hará lo mínimo e indispensable en estas últimas dos semanas. Se limita a ser el representante del PRO en La Plata. Por eso recibe a Diego Santilli, Horacio Rodríguez Larreta y Cristian Ritondo. Un recibimiento institucional. Para la foto. Pero su compromiso con la campaña llega hasta ahí. Tampoco se ha esforzado por sumar recursos para “bancar” a la lista encabezada por Mor Roig. Sabe que la convivencia con los dirigentes del radicalismo es importante. Le quedan dos años de gestión. Los carteles con su rostro y el de Santilli es otro de los elementos que se bajó como línea a nivel provincial. Otro gesto institucional. Pero Garro no está metido en el día a día de la campaña.
Las encuestas proyectan una elección compleja en La Plata: Garro mira atento los números y prefiere “no cazarse con nadie”. Se muestra como un hombre de Juntos, de las dos listas, sin intervenir en la disputa interna.
Diferente será el panorama tras las PASO. Allí sí tomará un mayor protagonismo. No querrá ver lesionada su autoridad con una derrota y además debe tratar de conservar la mayoría de Juntos por el Cambio en el Concejo Deliberante. Una tarea para nada sencilla.
