Gonzalo es de Perú pero desde hace muchos años vive en La Plata. Llegó al país en el 2005 y tiene una historia muy particular.
Aterrizó en nuestras tierras para visitar un amigo pero se enamoró de Argentina. No piensa volver y durante la pandemia inició un emprendimiento gastronómico bastante exitoso donde fusiona la comida peruana y la comida china.
“Vine a la Argentina en junio del 2005 para visitar a un amigo de la infancia. Él era cordobés pero se crió en Arequipa como yo. Fui a visitarlo en Chilecito, La Rioja, y me encantó el pueblito. Me quedé como nueve meses allí. Tenía que volver a Perú y decidí quedarme un poco más”, cuenta en diálogo con LAPLATA1.com.
Así fue que Gonzalo empezó “a bajar” por el país: vivió en Córdoba y luego se radicó en Ushuaia donde estuvo 2 años.
“Con 28 años tenía que ponerme a estudiar, entonces me vine a Capital Federal. Y allí me recomendaron La Plata porque decían que tenía una buena universidad. También me enteré que tenía un tío viviendo aquí en La Plata, con lo cual tomé la decisión de quedarme aquí”, recuerda.
Se anotó en la Facultad de Periodismo y Comunicación Social donde finalmente se recibió. Hoy es docente y también estudia Derecho.
Pero la pandemia fue un mazazo. Según cuenta Gonzalo, se limitaron los cargos docentes y ya no tenía tantas horas trabajadas como para poder subsistir en lo económico.
Allí fue que activó un Plan B: desde su casa empezó a cocinar comida de fusión. Fusión entre Perú y China.
“Lo empecé como una opción para conseguir un ingreso extra hasta que mejore la situación. Perú es uno de los países latinoamericanos donde más se ha desarrollado el tema gastronómico, sobre todo por la diversidad cultural. Por sus migraciones, tiene siglos de historia desde antes de los incas. Chifa es la fusión de la comida peruana ya consolidada con mucha influencia ibérica y africana con los migrantes chinos que llegaban del oriente. Perú es el lugar con más inmigración china en latinoamericana”, explica Gonzalo.
Y agrega: “Aprendí a cocinar viendo a mi mamá, mi tías, mis hermanas, mi papá también cocina muy bien. Yo recuerdo siempre haberlos visto en la cocina. Cuando llegué al país no sabía cocinar, pero en la necesidad recordé como lo hacían mis parientes y así fue practicando, creciendo, metiendo mano y aprendiendo”.
Y vaya que aprendió. Les cocinaba a sus amigos argentinos y quedaban fascinados con esta fusión. “Tenés que ponerte un negocio y vender esto”, le decían. Por necesidad, ese pedido terminó concretándose.
¿Qué elabora? Gonzalo hace Arroz Chaufa con Salsa Tipakay, Tallarín Saltado, Lomo Saltado y Pollo Broaster entre otras delicias.
A pesar de que el emprendimiento marcha bien, Gonzalo evalúa discontinuarlo. Ya empezó a acumular más horas como docente. Vuelve al Plan A.
“Mi idea es nacionalizarme argentino y quedarme aquí. Obviamente se extraña el país natal por los familiares y amigos, pero yo en La Plata me he establecido. Es una ciudad grande pero es bastante tranquila. Soy un enamorado de Argentina. Este es el lugar que elegí para vivir”, completa.
Para probar sus platos hay que comunicarse al 221 613 3988.
