Dejó Angola para probar suerte en La Plata y hoy es furor por su humor en las redes: “Una sonrisa puede cambiar el día”

Ari nació en Angola, un país ubicado al suroeste de África. Con 24 años y muchos sueños por cumplir, decidió emprender hace seis años el viaje de su vida. ¿El destino? La Plata. Y acá, en nuestra ciudad, la pelea día a día en busca de cumplir sus objetivos.

El humor lo lleva en la sangre, y la pandemia, lo catapultó al éxito. Tras intentos frustrados con YouTube por la imposibilidad de dedicarle las horas necesarias a la realización de videos, Ariel encontró la brecha con TikTok (aribalanga1), la red social del momento.

 

 

 

 

 

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“Mi mamá me sugirió ir a vivir a España con mi tío para estudiar, o venir a Argentina con mi hermano. Mi hermano me dijo lo bueno que era estar acá, y sin dudas fue la mejor decisión. Era un reto, no sabía hablar el español, no sabía cómo me iban a tratar. Mi hermano es negro albino, rasgos negros, pero piel blanca, yo soy negro. Mi mamá me aconsejaba, siempre para cuidarme, que tuviera cuidado por ser un país latino, racista. Me fomentaban el miedo, aunque nunca lo tuve porque vine con la idea de que si trataba bien a la gente, ellos harían lo mismo conmigo”, le dijo inicialmente a LAPLATA1.com.

La creación de contenido virtual empezó en 2018 y Ari recordó que “la idea fue mostrar un poco más sobre África y la cultura de Angola. África no es lo que muestra internet; hay mucha publicidad mal hecha, muestran pobreza, la presencia del Ébola, y demás enfermedades. Que no se puede vivir y es mentira. Hasta el día de hoy me preguntan si vivimos en los árboles, entonces intento cambiar las mentalidades, lo hice con este propósito”.

Y agregó: “por las situaciones de la vida no pude seguir con YouTube, no tuve el boom, y gracias a dios, durante la pandemia arranqué con mi emprendimiento. Mi mamá me había enviado plata para comprarme una computadora para la facultad en 2019. Agarré la plata, vendí la PC para pagar el alquiler. Lo hice por el doble de lo que había salido. Empecé con la compra y venta, y hoy vivo de eso. También trabajé en verdulería, como repositor en un chino, siempre la busqué. Y por cuestiones de necesidad de plata, vendí un canal de YouTube con más de 8 mil de suscriptores”.

Actualmente, su misión en TikTok es “compartir un buen momento, es mi propósito. Una sonrisa puede cambiar el día de los demás”, aseguró.

Y amplió: “lo hago por la cultura del país, me asombra de todo. Angola no tiene ni 50 años de independencia, y Argentina tiene más de 200 años, me sorprendí de todo. Acá se dan un beso, en mi país dos. LLevo 6 años y los videos que hago son referidos al primer impacto que tuve en mi llegada. Humor negro, porque los argentinos son buenísimos para eso”.