Pasaron diez meses ya desde su salida de Estudiantes, pero el dolor todavía perdura. Era su primera experiencia como entrenador en el club de toda su vida, en donde fue ídolo y campeón como futbolista. La decepción fue grande porque su identificación con la institución no alcanzó para sostener un difícil momento futbolístico, y además, algunos de sus ex compañeros fueron los que tuvieron que tomar la decisión de despedirlo. Pese a toda esta desilusión, hoy admite que está entusiasmado con volver a dirigir, y mientras aguarda por alguna posibilidad, continúa capacitándose.
"En Estudiantes por ahí las cosas no salieron como uno imaginaba. Fue duro porque es mi casa y uno siempre imagina lo mejor", admitió Leandro Desábato, en una charla distendida con ESPN Show. Si bien no quiso entrar en polémicas con la actual dirigencia, integrada por algunos de amigos, argumentó que la situación se volvió difícil porque "fue después de una pandemia, se fueron jugadores del equipo, se encaró un torneo que no se sabía si empezaba y se apostó un poco a los chicos". No obstante, también asumió su responsabilidad: "Sabemos que los resultados son los que mandan en nuestro fútbol y no salió bien".
Tras su primera experiencia como entrenador, los números son negativos y marcan que dirigió un total de 9 partidos (8 por la Copa Diego Maradona y 1 por la inconclusa Copa de la Superliga), con seis derrotas y tres empates. Además el equipo solo marcó 2 goles y recibió 9 en contra. Más allá de estas estadísticas, y siendo autocrítico de ese proceso, rescató: "Fue una linda experiencia porque saqué cosas muy buenas. Lo que te queda es que siempre hay que mejorar. Es como me dijo un entrenador que visité, vos debutás como jugador y vas mejorando en todo a medida que pasan los años". Por lo pronto, el "Chavo" ya sabe que deberá rearmar su cuerpo técnico ya que ahora no estarán ni Rodrigo Braña (su intención es ser técnico principal) ni Gustavo Salinas.
Aunque admitió que actualmente "está tranquilo y esperando", se mostró expectante por alguna chance que pueda darse y analizó que "hoy en el mercado hay muchas más posibilidades". Mientras aguarda entonces por esa oferta, continúa capacitándose. "Empecé un curso de video analista. Estuve trabajando con un coaching, hablando de lo que pasó. Y estoy aprovechando para conocer gente y sumar experiencia", detalló el defensor. Entre esas actividades que realiza, además, suele recorrer al predio de City Bell para observar partidos de juveniles y reserva. Allí sigue frecuentando a sus amigos y ex compañeros, y el paso de los meses, parece haber sanado algún roce que existió y que se hizo público durante su paso como técnico albirrojo.
