Juntos se impuso en La Plata con el 46% de los votos pero la expectativa era otra. Imaginaban llegar al 50% y estirar la ventaja con el Frente de Todos, algo que no ocurrió. ¿Qué pasó en el medio? Mucho para revisar. Las encuestas encargadas por el ejecutivo local le daban arriba del 50%. El impacto de los verdaderos números no fue menor. Se sentía en el ambiente del bunker.
De hecho, el porcentaje de votos de Juntos en estas elecciones generales fue inferior al 2017 y 2019 en La Plata. Para Garro también era un test clave para sus pretensiones provinciales del 2023. Había una puja entre los distintos caciques de Juntos para ver quién llevaba más votos a Santilli.
Jorge Macri, por ejemplo, infló el pecho en sus redes sociales: “Con más del 58% de los votos somos el municipio que mayor porcentaje obtuvo de la lista de Juntos de toda la provincia”.
Fue un domingo raro en el Salón Vonharv, donde Juntos estableció su bunker. Con el correr de los minutos se consolidaría otra mala noticia para el oficialismo local: repartían los diputados provinciales en partes iguales: 3 para Juntos y 3 para el Frente de Todos.
En el 2017, Cambiemos se había alzado con 4 diputados provinciales en la Octava Sección. De esta forma, quedó afuera Carolina Barros Schellotto. El escaño en compulsa quedó finalmente para el massista Juan Martín “Tachu” Malpeli.
También en el bunker llegaba otra mala noticia, de índole provincial: Juntos por el Cambio perdía la mayoría en el Senado Bonaerense tras la remontada del Frente de Todos en varios municipios.
El clima efusivo nunca llegó al Vonharv. Las expectativas eran otras. La idea de un triunfo rutilante e histórico en La Plata estuvo lejos de ocurrir a pesar del enorme despliegue publicitario en toda la ciudad.
