Una de las frases más escuchadas y que habitualmente suelen repetir los jugadores, los entrenadores y a veces hasta los dirigentes es que "en el fútbol siempre hay revancha". Y en esta historia, esa reflexión, encaja de manera perfecta. Cuando arrancaba el mes de noviembre y de manera inesperada Néstor García Martinoli recibió la noticia más dura y la que nunca hubiese querido escuchar en su incipiente carrera futbolística: el club que lo había formado, arropado y cobijado durante años había decidido prescindir de sus servicios y su ilusión de firmar su primer contrato quedaba trunca.
Su ciclo en Gimnasia se terminó al igual que el de Gustavo Areco, Fernando Martínez, Matías Toledo, Andrés Gutiérrez y Tomás Cataldi, todos nacidos en el año 2000, e integrantes de la reserva de Sebastián Romero. Sin embargo la vida deportiva para García Martinoli rápidamente le dio una segunda oportunidad y en las últimas horas se convirtió oficialmente en refuerzo de Estudiantes de Río Cuarto y el marcador central, que ocasionalmente puede desempeñarse como lateral, jugará la próxima temporada en la Primera Nacional.
Según lo que le adelantaron a LAPLATA1.com el vínculo será por tres años, es decir hasta diciembre de 2025 y el jugador nacido en Berisso, en las próximas semanas viajará a Córdoba para comenzar con la pretemporada, tendrá la chance de mostrarse en una institución que hace muy poco estuvo muy cerca de ascender a la máxima categoría y que se prepara para ser nuevamente protagonista en el torneo que viene.
Cabe destacar que García Martinoli fue capitán del Lobo hasta la quinta división y en 2017 fue reconocido por la institución albiazul como el Mejor Deportista del Año. Además integró las selecciones juveniles y llegó a realizar una pretemporada con el plantel profesional cuando Pedro Troglio era el entrenador pero se fue de Gimnasia sin poder cumplir el sueño de debutar en primera y de convertirse en profesional.
