Aura Fariñas llegó de Venezuela con su familia hacia nuestra ciudad. Es una de las tantas historias de personas de ese país que huyeron para Argentina por la crisis económica.
En diálogo con LAPLATA1.com, Aura cuenta que arribaron en octubre de 2018 con su pareja y un pequeño de 3 años.
No fue fácil la adaptación pero rápidamente se enamoraron de La Plata. Ellos son profesores de inglés y se desempeñan aquí como docentes particulares. Pero tampoco acá el dinero sobra. Fue por eso que iniciaron proyectos gastronómicos aprovechando el talento de Aura para la repostería. También hace Hallacas, una comida típica de Venezuela.
“No queremos quedarnos aquí para siempre porque tenemos nuestros bienes y familia en Venezuela. Pero hasta que la situación económica no mejore, no vamos a volver”, cuenta Aura.
“Escogimos La Plata porque nos pareció interesante en el tema educativo. Es una ciudad universitaria, hay muchas carreras y oportunidades. Lo pensamos por nuestro hijo también. Y a nosotros nos gustaría incursionar como profesores universitarios en algún momento”, agrega la joven.
“No tenemos nada negativo para decir de La Plata. Es una ciudad tranquila y eso es genial porque veníamos de un lugar similar. Es bonita, pequeña y las personas nos acogieron muy bien. Siempre nos trataron bien y eso nos encanta”.
Pero además de lo económico, Aura retrata la violencia extrema que se vive en las calles de Venezuela.
“Una cosa que nos gusta mucho de La Plata y de Argentina en general es el espacio recreativo para los niños. Cuando nos venimos para aquí no podíamos ir a un parque o a una plaza con nuestro hijo. La inseguridad es terrible. Y ahora empeoró mucho más. Acá la recreación es muy importante”, concluye.
