El principal sospechoso de la muerte del exjugador de rugby argentino Federico Martín Aramburu el sábado en París, fue detenido el martes por la noche en Hungría, informaron a la AFP este miércoles fuentes próximas a la investigación.
El detenido, Loik Le Priol, un hombre de 27 años, exmilitar y miembro de un movimiento de extrema derecha llamado GUD, es sospechoso de haber disparado contra el exinternacional argentino de los Pumas, de 42 años, que murió en el acto.
Una mujer de 24 años sospechosa de conducir el vehículo desde el que los dos hombres presuntamente dispararon al exinternacional argentino fue acusada el martes de “complicidad en el asesinato” y puesta en prisión preventiva.
El exjugador de rugby fue asesinado a tiros tras un altercado en el bar Le Mabillon del barrio de Saint-Germain-des-Près, en el centro de París.
Le Priol, detenido el martes en Hungría, cerca de la frontera con Ucrania, pertenece a movimientos de ultraderecha y debía comparecer ante un tribunal en junio por “violencia agravada” contra un miembro del GUD.
El exjugador del Biarritz Olympique Federico Martín Aramburu, exjugador de Los Pumas, fue asesinado a tiros el pasado sábado frente a su hotel, a los 42 años. Los hechos tuvieron lugar alrededor de las 6:15 horas, en el distrito de Saint-Germain, en el distrito 6 de París, según informó una fuente policial.
A la salida de un establecimiento nocturno se desató una disputa verbal entre dos grupos de personas que terminaron a golpes de puño. El jugador de rugby surgido en el CASI formaba parte de uno de los dos grupos y, según fuentes de la investigación, tiró de la capucha a un individuo del otro sector antes de que la seguridad del establecimiento lograra separarlos y quienes terminarían cometiendo el crimen abandonaran el lugar.
La disputa no queda ahí: un hombre y una mujer regresaron al lugar en un automóvil, tipo Jeep. Se disparan dos tiros en dirección al jugador de rugby, sin tocarlo. Siempre según la misma fuente, otro individuo recuperó el arma y persiguió a pie al argentino, disparándole en su dirección seis veces. Cinco balas alcanzaron a Federico Martín Aramburú, quien murió en el lugar.
La familia de Federico Martín Aramburu denunció el domingo un “crimen odioso” e hizo un llamamiento para dejar trabajar a la policía tranquilamente.
“Este crimen odioso y su muerte dejan a su familia y amigos, y a todos el mundo del rugby aturdidos en un dolor indescriptible”, dice el comunicado transmitido a la agencia AFP por Yann le Brass, abogado de la familia.
“Los próximos días tienen que estar dedicados al recogimiento de suy familia y al trabajo sereno de la brigada criminal de París”, agregó la nota.
