Agustín cumplió en las últimas horas un sueño: recorrer el mítico túnel ubicado debajo de Plaza Malvinas.
“Es un sueño cumplido: bajar a uno de los túneles ocultos de La Plata. Es un túnel hecho por el Regimiento 7 de Infantería, que ocupó el espacio de la hoy Plaza Malvinas Argentinas entre las décadas de 1910 y 1980”, explicó en diálogo con LAPLATA1.com.
Agustín nació en Capital Federal, vivió en distintos lugares de la Provincia de Buenos Aires y ahora reside en nuestra ciudad. Es un fanático de las curiosidades, de los detalles, de hechos histórico que no han sido explorados en su máxima dimensión.
“La visita me pareció muy buena porque te empapa de todo ese contexto histórico y remarca cómo ese espacio se relaciona con el barrio. En el pasado hubo alguna otra visita que no contaba nada de todo eso y consistía en cruzar el túnel, más a título de curiosidad y medio colgándose del mito de los túneles masónicos”, explicó.
Un sueño cumplido: bajar a uno de los túneles ocultos de La Plata, en Plaza Malvinas Argentinas.
— Ave (@agustin_avenali) April 30, 2022
¿Masonería? ¿La famosa calle 52 subterránea? pic.twitter.com/KbBtNHxAuT
“Y justamente ahí recae su importancia: el uso que le dieron los militares en lo diario y en hechos históricos particulares que ocurrieron ahí, como la Revolución del 56 que se levantó contra quienes habían derrocado a Perón”, destacó Agustín.
“El cuartel fue tomado por los militares rebeldes que querían la vuelta de Perón. Uno de ellos tenía una ametralladora de juguete. Pero el levantamiento se sofocó y terminaron agarrando al teniente coronel Jorge Cogorno, uno de los ideólogos, y lo fusilaron. Según cuentan, llevaron el cadáver recién fusilado por el túnel”, agregó.
Sobre su interés por estos temas, Agustín recordó que “viene desde siempre”: “Desde chico me cuelgo mirando planos, buscando cosas raras, cuando camino por la calle trato de mirar detalles, curiosidades”.
“Por eso cuando vine a estudiar a La Plata en 2009 fue como llegar al paraíso, una ciudad tan llena de mitos e historias. La primera que me contaron fue la leyenda de que la estatua ecuestre de Plaza San Martín no es el Padre de la Patria sino O'Higgins, por una confusión en el envío. Fue refutada varias veces, pero fue el puntapié inicial para alimentar más mi curiosidad”, recordó.
“Hay cosas urbanas como por qué las calles se llaman así o asá, el origen de los nombres de los barrios y las provincias, la historia de por qué se maneja por la derecha o la curiosidad del límite terrestre entre Argentina y Uruguay; pero también cosas más generales como cuál es la cara y cuál es la ceca de las monedas o por qué el trébol de tres hojas es el símbolo de Irlanda y no el de cuatro”, siguió Agustín.
Y completó: “Sin pretender ser grandes tratados, el objetivo es compartir historias y detalles interesantes que después se puedan contar en un asado o una reunión de amigos. Y, de paso, despertar la curiosidad de quien lo lea, y que pueda ahondar después investigando más sobre el tema que le haya interesado”.
