Se cumplieron cuatro meses de la muerte de Gerardo Rozín, y su expareja Carmela Bárbaro se refirió al difícil momento familiar que atravesaron, el duelo tras la muerte del conductor de La peña de Morfi y sobre todo, la reacción cómo ayuda a Elena, la hija de 12 años de ambos.
“Esta marca va a estar toda la vida conmigo. Fue un proceso duro realmente, no se me ocurre otra manera de describirlo, me enteré cuando se enteró él porque nosotros conversábamos, estábamos conectados, tomamos las decisiones que se daban en cada momento”, aseguró la periodista en Agarrate Catalina.
“Creo que hice todo lo que pude para respetar su voluntad, no hay una mejor manera y tampoco hay un manual de cómo enfrentar una situación así. Creo que fue haciendo lo que él sentía que tenía que hacer”, contó, sobre cómo transitan el momento.
La panelista de Momento D se refirió al interés del productor de mantener reserva sobre su enfermedad. “Yo agradezco mucho que se haya respetado la voluntad de guardarse esto para la intimidad. Fue un gesto de cuidado. Él no lo hizo por él, lo hizo por sus hijos. Él preservó la cotidianeidad de los chicos para que sigan adelante”, afirmó.
También Carmela contó cómo acompaña a su hija en transitar el duelo. “Ella tiene dudas, tiene preguntas, yo insisto en que la figura del papá está presente. Todavía está su presencia, hay marcas, hay legados y eso va a estar siempre”, dijo.
