Paula Bergero es una investigadora platense, trabaja en INIFTA e insólitamente se tira abajo: “No hice grandes cosas”, le dice a LAPLATA1.com.
Pero esta madre de tres hijos, y que actualmente vive en Villa Elisa, realizó un modelo matemático que predijo el rebrote de la gripe en en todo el mundo.
“Nací en 1974, nadie en mi familia tiene nada que ver con la ciencia, pero siempre desde chiquita me gustaba la ciencia ficción. Leía un montón. Iba a la escuela 45, pero como era muy charlatana la maestra le dijo a mis padres que me cambiaran a la Anexa, y después fui al Nacional”, recuerda.
Allí estuvo entre los mejores promedios y decidió enfilar para Física: “Después un poco se me fue el entusiasmo porque era menos estimulante de lo que había pensado, pero fui avanzando en la carrera. En algunas épocas no tenía motivaciones y en un momento encontré un grupo de investigación que trabajaba con fractales. Me acerqué a ellos y empecé a investigar con computadoras. Eran simulaciones y modelos matemáticos de diferentes situaciones. Ahí me contacté de nuevo con la carrera y me dieron ganas de terminar”.
Los fractales hicieron redescubrir su amor por la ciencia. Tardó 10 años en recibirse. Asegura que fue “bastante vagoneta”. Insiste con tirarse abajo. Pero su labor creció: trabaja con modelos de simulaciones sobre cuestiones de salud.
Su tesina fue sobre la dinámica del ritmo cardiaco y para eso trabajó con médicos. Hizo un doctorado y posdoctorado.
“En el 2012, hicimos modelos matemáticos de la tos convulsa, que por ese momento emergía en el mundo. Cuando empezó la pandemia, mis investigaciones se dirigieron al Coronavirus y sus consecuencias. Sobre todo el efecto de las medidas de control y cuarentena sobre otras enfermedades respiratorias”, cuenta Paula.
Trabajó, entre otras cosas, con la correlación entre el dengue y el Covid: cómo era la dinámica de los pacientes que tenían ambas infecciones. Interesante.
Además, elaboró un complejo sistema de ecuaciones que predecía el rebrote de gripe en todo el mundo para este 2022: “Con la cuarentena se redujeron las otras enfermedades respiratorias, pero a través de un efecto dinámico podíamos ver cómo se venían los rebrotes. Y eso ocurría en todo el mundo, sin importar el Hemisferio”.
Pero lo de Paula no son solo ecuaciones. Es apasionada por la divulgación de la ciencia y los científicos. Más precisamente: las científicas.
“Trabajé 17 años en el Museo. Ahí experimenté contar la ciencia en diferentes formatos y con diferentes públicos. También escribí guiones, atendí stands en ferias, hicimos tres libros”, enumera.
Y algo más interesante: generó entradas en Wikipedia de diferentes científicas argentinas que no estaban visibilizadas. 25 en total: “Hay una cuestión de género en las ciencias duras donde hay un menor reconocimiento y una menor participación de mujeres".
