Solo restan cinco meses para que finalice la segunda conducción de Gabriel Pellegrino y más allá que en varias oportunidades el presidente albiazul dejó en claro que no buscará un nuevo mandato según pudo confirmar LAPLATA1.com el actual oficialismo tiene decidido participar en el próximo acto eleccionario y la intención, con algunos nuevos protagonistas, es continuar manejando los destinos del Lobo.
El principal interrogante por estos días y que seguramente aumentará en las próximas semanas a medida que se acerque la fecha de las elecciones será determinar el candidato a ocupar el sillón de calle cuatro. En principio hay tres apellidos, cada uno con sus matices, que se perfilan para intentar ser la máxima autoridad albiazul a partir de diciembre de 2022. Uno de los actuales secretarios generales, Daniel Giraud, asoma con chances de ser pre candidato. Posee mucha experiencia dirigencial, está desde el primer día de gestión acompañando a Gabriel Pellegrino y tiene un amplio conocimiento de la institución por haber participado en otros momentos de la vida política del Lobo junto a diferentes actores de la vida política e institucional. Es la persona que habitualmente viaja junto con el plantel profesional y el nexo entre los empleados de Gimnasia y la dirigencia. Es clave en el día a día.
La otra figura que en el último tiempo tomó mucho protagonismo a partir de su desempeño es Gustavo Vila. Es uno de los cinco vocales suplentes que ingresó al club en una de las últimas renovaciones dirigenciales y que fue acercado precisamente por Giraud, un hipotético competidor en la sucesión presidencial. Se puso al frente de las negociaciones con Eric Ramírez y fue decisivo para la renovación contractual del atacante. De hecho no fue casualidad que haya aparecido en la foto institucional de Gimnasia a la hora de la firma del futbolista. “Es un candidato joven, fresco, que tiene ganas de trabajar y no está contaminado por la política del Lobo” le aseguraron a este medio.
Por último el otro nombre que está dando vueltas en esta carrera política y que nadie se anima a descartar es el de Mauro Coronato, quien hace unos meses atrás presentó su renuncia aduciendo “cierto desgaste y principalmente diferencias a la hora de tomar ciertas decisiones institucionales”. El detonante para el ex integrante del jurado de honor titular fue resignar la localía del bosque para ir a jugar al estadio Único Diego Maradona. Sin embargo nunca se terminó alejando del todo del club y mantiene contacto fluido con varios integrantes de la comisión directiva. “Es un pellegrinista puro“ le aseguraron desde el entorno del presidente de Gimnasia a LAPLATA1.com y eso no es un dato menor ya que Pellegrino, pese a no jugar para ser nuevamente el uno, no descarta tener un cargo de segunda o tercera línea que le permita seguir participando en AFA y en la Liga Profesional y para eso debe asegurarse de tener a una persona de su confianza manejando al Lobo. Y Coronato encaja perfectamente en ese esquema de "fidelidad".
Está claro que a la rosca política de Gimnasia le faltan varios capítulos como ejemplo saber si la oposición irá o no a la contienda electoral. Mucho dependerá de los resultados deportivos pero lo que es un hecho es que el oficialismo pretende seguir manejando los destinos del Lobo y que hay varios candidatos para suceder a Gabriel Pellegrino.
