Marcela es contadora y junto a otras dos profesionales reconstruyen la historia de La Plata. Pero no cualquier historia: las historias jamás contadas.
Hicieron una extensa investigación sobre diferentes casos o “mitos”. Pero ojo: no eran mitos, sino historias verdaderas.
“Éramos un grupo de profesionales: una psicóloga social, una directora de Bellas Artes y yo que soy contadora pública. Todas hicimos cursos de especialización de turismo en CABA y consultamos a especialistas e investigadores de fenomenos paranormales. Pero investigadores en serio. Queríamos relevar la historia no contada de la ciudad, las historias que circulan de boca en boca”, dice Marcela a LAPLATA1.com.
“Tuvimos la suerte de encontrar gente de 90 años, descendiente de las primeras familias de la ciudad, que nos permitieron probar que algunos mitos no eran mitos. Fueron hechos reales. Nos contaron historias de fantasmas, amores prohibidos, y lo que nos pidieron fue reserva de identidad”, agrega.
Una de esas historias data aproximadamente de la década del 70. Una de las integrantes del equipo pudo dar con un protagonista de un hecho terrible: una joven quedó esperando en el altar del San Ponciano y su prometido nunca apareció. ¿La razón? Había sido envenenado por su amante.
La amante vivía en un departamento PH lindero a su novio "prohibido" en la zona de la Facultad de Medicina. Ella era del interior, mientras que la novia “oficial” del joven era profesora de inglés y pertenecía a una “familia bien”. Cuentan que era mucha la presión para este joven: no podía torcer el rumbo de su verdadero amor. Finalmente ocurrió lo peor: la amante no soportó el casamiento. Según recuerda Marcela, la joven fue detenido y luego se quitó la vida. Un hecho traumático.
“Fuimos hablando con la gente mayor todo por contactos. Armamos una cadena con gente nacida en 1905, por ejemplo. Sabían muy bien todo lo que habían sido los primeros años de la ciudad de La Plata. Eran personas que frecuentaban el jockey club, la elite platense. Me enteré de muchas cosas, sobre todo de las cosas de las que hablaban las chicas de esa época”, juega al misterio Marcela, que no quiere revelar todas las historias.
“Del estudio que hicimos llegamos a la conclusión de que los platenes no conocen la historia de la ciudad y que para pasear eligen CABA. Por eso diseñamos dos circuitos que casi siempre incluyen una charla previa. En La Plata son caminatas y hacemos desayuno o merienda. Vamos a los lugares emblemáticos. Y en CABA no vamos a los lugares tradicionales y si es necesario contamos con guias especializados”, comenta.
Y además de estas visitas, Marcela también interactúa con la gente con “enigmáticos”.
“Tenemos aproximadamente 7 mil seguidores y la gente es muy participativa. Empecé con el ‘¿en dónde estoy?’, y le gusta a la gente participar de cosas de la ciudad, le gusta recordar su infancia, sobre todo se enganchan cuando rememoramos los lugares clásicos como La Modelo o Bacci”, completa Marcela, a quien pueden contactar y leer en "Marcela La Plata Suotra Historia Campo".
