Un jubilado de 77 años vivió una madrugada de terror. Sufrió una violenta entradera y le sacaron tres dientes producto de los golpes.
Todo sucedió en 13 entre 35 y 36 mientras descansaba. Se dio cuenta que había un intruso en su vivienda cuando una cobija lo envolvió para que no pudiera oponer resistencia.
“Te quedas en el molde o sos boleta”, le dijeron. La víctima tenía dificultades para respirar.
No contento con eso también le propinó golpes en la cabeza. El ladron le exigía que le diera “la plata que tenía guardada” y todos los objetos de valor.
La víctima le dio dinero pero el sujeto creía que había más plata. Así fue que continuaron las torturas físicas y psicológicas.
“Me pegó tanto que me bajó tres dientes”, reconoció que el jubilado. “No entiendo por qué tanto saña. Siempre me mostré con la intención de colaborar. Se ve que por la frazada no me entendía lo que le decía y me pegaba”, agregó.
Según se supo, escapó con 2 mil dólares y 30 mil pesos. El sujeto todavía no fue localizado y se presume que tiene entre 40 y 50 años.
