Un subcomisario de la Policía Bonaerense sufrió un gravísimo hecho de inseguridad cuando fue sorprendido por dos delincuentes, que estaban a su espera dentro de la vivienda ubicada en la localidad platense de Arturo Seguí.
El robo transcurrió a las diez de la noche del miércoles, en la calle 418 entre 157 y 158, cuando el suboficial entraba en su casa y se encontró con dos individuos, con armas de fuego. Allí intentó forcejear con los malvivientes pero estos lograron controlarlo, propinándole una feroz golpiza.
Un vecino del barrio que habló con el diario El Día comentó que “le dieron varios culatazos, lo hicieron caer al piso y ahí le pegaron bastantes patadas por todo el cuerpo”. Para que la víctima no se resista lo ataron de pies y manos.
De su casa escaparon con dinero, objetos de valor, con el arma reglamentaria y la credencial del suboficial. Cuando los delincuentes se dieron cuenta de que la víctima era policía uno de ellos lo amenazó con dispararle. Antes de huir doparon a los dos ovejeros alemanes.
Tras el hecho se hicieron presentes en la escena efectivos del Comando de Patrulla y de la comisaría decimosegunda, el operativo montado para dar con ambos asaltantes pero la investigación no rindió frutos.
