El presente de Estudiantes no mejora. De hecho, va de mal en peor. Anoche, ante River, el equipo dirigido actualmente por Pablo Quatrocchi sumó su cuarta caída en fila en el certamen. La Libertadores 2023 ya parece una utopía y la clasificación a la Copa Sudamericana comienza a complicarse. Con doce puntos por jugarse y con el futuro para la próxima temporada aún incierto, el club obtuvo una marca que no veía desde hace más de 5 años.
De hecho, entre la era Zielisnki y el tercer interinato del ex técnico de reserva, el Pincha acumula cuatro derrotas al hilo: el 1-2 ante Defensa y Justicia en UNO, luego el 1-3 frente a Atlético Tucumán en el Monumental José Fierro, después el 2-4 contra Colón de Santa Fe nuevamente en el Hirschi y finalmente el 0-5 ante River en el Monumental.
La última vez que Estudiantes había perdido cuatro partidos en fila había sido entre el 2016 y el 2017. En aquella oportunidad el equipo que era dirigido por Nelson Vivas cayó entre las fechas 13 y 15 (las dos primeras a fines de 2016, mientras que la última ya en 2017) ante San Martín de San Juan (2-3), Defensa y Justicia (1-2) y Vélez (2-3); para luego perder en su debut de Copa Libertadores ante Botafogo en Brasil por 2 a 1.
No obstante, si se trata de partidos de un mismo torneo de Primera División, para encontrar el antecedente más reciente hay que viajar hasta el año 2002, cuando Estudiantes vivía una situación similar a la actual. Por el Torneo Apertura, recibió 13 goles entre sus cuatro derrotas en fila y también con diferentes entrenadores.
En ese sentido con Lanús perdió por 1 a 0 en el último partido de Néstor Craviotto como entrenador. Luego fue 1-2 ante Arsenal en La Plata, aunque con Juan Ramón Verón sentado interinamente en el banco de los suplentes. Finalmente, ya con Oscar "Cacho" Malbernat en el puesto de técnico cayó 1-3 frente a Gimnasia en el clásico jugado en "El Bosque" para luego volverse sin nada de Córdoba: 1-2 vs. Talleres.
