Un hombre denunció que su hija menor de 10 años rompió en llanto y, entre lágrimas, le confió a su mamá que su abuelo abusaba sexualmente de ella cuando iba a la casa a visitarlo. Días atrás, otras dos amigas de ella, de 7 y 10 años y también oriundas del barrio Los Cuarteles de la ciudad de Olavarría, señalaron al mismo hombre de 70 años como su abusador.
El caso estalló el 2 de octubre cuando la nena confesó su padecimiento. Luego se supo que, al menos, habría más de tres denuncias en contra del sindicado abusador.
Según el relato de Franco Quiroga, el denunciante, todas las tardes sus hijas de 11 y 10 años visitaban a su abuelo materno. “Nunca imaginamos que podía hacer una cosa así”, manifestó. La menor rompió el silencio semanas después de que lo hicieran sus amigas del barrio.
El pasado 19 de septiembre una vecina denunció al hombre luego de que sus pequeñas hijas le contaran que éste las tocaba cuando iban a su casa a jugar con sus nietas. La causa quedó caratulada como “abuso sexual con acceso carnal” y la instrucción está cargo de la Unidad Fiscal de Instrucción Nº4 al mando de la Dra. María Paula Serrano.
La acusación tomó fuerza cuando, el pasado 2 de octubre, la menor de las nietas del denunciado se levantó llorando y le contó a su mamá “que el abuelo le había hecho lo mismo que a la otras nenas”, aseguró Quiroga.
La niña comentó que el hombre las “tenía amenazadas para que no hablen”, tanto a ella como a su hermana mayor. Si lo hacían, “les iba a pegar”, confesó la pequeña.
De inmediato, la madre de las niñas las llevó a la comisaría de la Mujer de Olavarría donde radicaron la denuncia. Una vez allí, las menores declararon ante la Justicia y, mediante dibujos, representaron los abusos de los que habrían sido víctimas.
Los dibujos de la menores, pruebas clave para la acusación
“Hizo todos rayones, estaba muy nerviosa, con mucho miedo”, contó el papá de las niñas, en relación a los dibujos que había hecho una de ellas. Asimismo, explicó que, por recomendación de los especialistas, no habló sobre lo sucedido con ninguna de sus hijas “para no confundirlas”, hasta tanto no brindaran su testimonio en cámara Gesell.
Fue tal la repercusión del caso que los vecinos del barrio se enfurecieron y prendieron fuego la vivienda del acusado, situada en las calles 155 y Alsina de Olavarría. Una vez que la vivienda se derrumbó, atacaron a golpes al sospechoso.
El hombre fue trasladado al Hospital Municipal de Olavarría y luego fue derivado a un geriátrico, donde se encuentra desde entonces hasta que se le realicen las pericias psiquiátricas correspondientes, previstas para abril del año próximo.
