La victoria del Lobo el pasado domingo ante Banfield en condición de visitante no solamente lo puso a una unidad de asegurarse el ingreso a una copa internacional sino que también provocó el fin de una racha que, en menor o mayor medida, marcó toda una época en la historia moderna del fútbol argentino y en particular del clásico platense.
En concreto, con el triunfo ante el "Taladro" el plantel de Néstor Gorosito le sacó diez puntos de diferencia a su eterno rival. De esta manera, y cuando restan apenas tres fechas para el final de la Liga Profesional, a Estudiantes (que en condición de local ante Lanús volvió a sumar de a tres luego de cinco jornadas) le será imposible superar en la tabla de posiciones al Lobo.
¿Y cuánto pasó desde la última vez que se dio algo así? Siempre considerando los campeonatos regulares de Primera División, el antecedente más reciente data del año 2005. En aquella oportunidad y por el Torneo Apertura, el Gimnasia de Pedro Troglio (quien daba sus primeros pasos en la máxima categoría) terminó subcampeón con 37 puntos, nueve más que los obtenidos por el Pincha de Burruchaga.
Cabe destacar que al equipo albiazul aún le quedan cuatro partidos por disputar: hoy con San Lorenzo, Argentinos Juniors, el reprogramado duelo ante Boca (todos en La Plata) y Talleres en Córdoba. Por su parte, a los dirigidos por Pablo Quatrocchi les resta enfrentar a Huracán y a Vélez como visitante para recibir en última instancia a Godoy Cruz de Mendoza.
El ciclo de Gorosito pese a las adversidades (lesiones graves, atraso en los salarios, nula llegada de refuerzos) sigue rompiendo rachas y se encuentra a detalles de lograr el objetivo de volver a jugar un certamen internacional: la Sudamericana 2023 ya la acaricia y va en busca de la Libertadores. Los más utópicos sueñan con arrebatarle el título a Boca o Racing.
