Martina Stewart se convirtió en la participante “más odiada” por las redes en esta nueva edición de Gran Hermano y con más del 57% de los votos del público fue la segunda eliminada.
En la presentación de su perfil, durante el primer programa de Gran Hermano, la joven de 25 años ya había resonado entre los usuarios de Twitter por considerar que le daba “asquito” la bisexualidad. Además, dentro de la casa expresó en reiteradas oportunidad comentarios de la misma con la misma connotación.
Este lunes por la noche, durante el debate de Gran Hermano, Martina comentó que todas esas declaraciones las hizo para "picantear" y lograr quedar. Sin embargo, algunas explicaciones que dio en el vivo no coincidían con lo que antes había comentado.
Además, en las últimas horas, se filtró el casting que hizo la ex participante y generó más revuelo. Es que en las imágenes difundidas en redes sociales, Martina se presenta como "muy celosa y homofóbica".
