Ignacio Baña es un jóven de 24 años, que participa de las actividades deportivas en el club Sociedad de Fomento Polideportivo de Gonnet. Lamentablemente, le detectaron una patología que lo obligó a retirarse de la competencia de alto rendimiento a una temprana edad.
El hoy ayudante técnico del primer equipo declaró para LAPLATA1.com: "Después de la pandemia volvimos a entrenar. En la primer semana de entrenamiento falleció un compañero que jugaba conmigo en Villa San Carlos por un problema en el corazón. Estaba corriendo y empezó a sentirse mal, se descompensó, intentaron hacerle RCP y no hubo caso."
Nacho continuó con: "A partir de ese hecho, tomé la decisión de hacerme controles por las dudas, para ver si está todo bien. Me hice un electro, una ergometría y un eco doppler. La ergometría me salió perfecto, me la hicieron en la cinta mientras trotaba, el electro me salió perfecto, y en la eco doppler me detectaron un problema de nacimiento, una miocardio no compactado en el ventrículo izquierdo, luego me tuve que hacer una resonancia para confirmar la patología."
"A raíz de eso, mis papás se tuvieron que hacer estudios, que por suerte no tienen nada. Ahora tengo que hacerme estudios cada un año por control. Si quiero jugar con amigos, puedo, si quiero hacer otro deporte como el tenis, puedo. Lo que no puedo es practicar deportes de alto rendimiento como lo hice toda mi vida" finalizó.
Es un hecho que lleva a la reflexión, para que muchos deportistas tengan en cuenta a la hora de practicar deportes, que la salud es importantísima, y que una falla en el organismo puede provocar un suceso irreversible.
