Fueron encontradas bajo agua en una fuente termal de la ciudad de San Casciano dei Bagni, situada en La Toscana.
Son estatuas de bronce y monedas que datan entre los siglos II a.C y I d.C. “Es un descubrimiento sensacional desde muchos puntos de vista. Es el yacimiento más rico del Mediterráneo en el campo de los bronces. Hay decenas y decenas de artefactos de distintos tamaños, en su mayoría considerables”, expresó Massimo Osanna, arqueólogo.
Las estatuas se encuentran en perfecto estado, además fueron encontradas en el mismo santuario unas 5.000 monedas de oro, plata y bronce, y algunos objetos de culto.
Entre las estatuas recuperadas están las efigies de Hygieia y Apolo, así como un bronce que recuerda al famoso Arringatore, una estatua encontrada hace años en la zona de Perugia y que representaba la figura del orador Aulo Metelo, un senador etrusco durante la República romana.
“El santuario, con sus estatuas, aparece como un laboratorio de investigación sobre la diversidad cultural en la antigüedad, un testimonio único de la movilidad etrusca y romana”, añadió Tabolli, que afirma que este descubrimiento “es una oportunidad única para reescribir la historia del arte antiguo, y con ella la historia del paso entre etruscos y romanos en la Toscana”.
