"Ashe" tiene 28 años y vive en La Plata. Es Diseñadora en Comunicación Visual y Artista Visual.
Hace un tiempo se adentró en el mundo de Shibari Kinbaku y así lo expresa: “La práctica me resulta ser una experiencia sensorial, tanto por el contacto físico con la persona que me ata, como también por la presión que se genera entre las cuerdas de yute al momento de realizar una atadura”.
“No sólo corporalmente suceden cosas, sino que también en el plano emocional. Es una conexión hacia el momento presente, una especie de entrega y confianza. Me pareció una genialidad ver fotos de personas suspendidas en el aire y su gestualidad al estar atadas”.
En cuanto, si recibió algún tipo de mirada despectiva aclaró: “Son los menos a quienes les resulta chocante, creo que les da impresión. En algún punto mi exposición forma parte de una generación que necesita expresar su sexualidad sin tantos tabúes”.
“Poner el cuerpo y utilizarlo como herramienta, descubrir y entender cuáles son mis límites, poder expresar qué prácticas me gustan, me dan placer y cuales otras no tolero. La entrega se torna absoluta, y te aseguro que después de una clase o una sesión de Shibari Kinbaku terminas muy relajada”, mencionó en cuanto a sus sensaciones al realizar la práctica.
Con respecto a la técnica empleada sostuvo: “Los nudos los teje el atador en el cuerpo del modelo, mediante una técnica en particular y en zonas específicas del cuerpo, las cuales quedan inmovilizadas, y no deberían ser lastimadas”.
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“Aunque en algunos casos puede que se adormezcan ciertas partes del cuerpo o que queden marcas en la piel, por la presión que se ejerce, esto depende de cada corporalidad y de cómo se realice la técnica”.
Además comentó los nuevos espacios en los que le permitió adentrarse ésta práctica: “Me pasó conociendo a Seba, mi compañero de clases regulares, que me propuso hacer fotos, y yo desde mi rol como artista visual propuse escenas. Recreamos una que me divirtió y me gustó mucho donde yo estoy atada a un árbol”.
“También me pasó que una pareja amiga me invitó a realizar contenido para Only Fans, donde colaboré en una práctica de BDSM. Hicimos un juego de roles”.
“Quiero dejar en claro que éstas prácticas son consensuadas, siempre hay que saber comunicar cuáles son los límites de cada une”, aseguró.
“Si les da curiosidad, y quieren ser parte de ésta práctica no duden en experimentar y averiguar cuál es el rol que les quede mejor en este espacio (modelo, atador o espectador). Y probablemente si algún día incursionan, se van a estar abriendo a una nueva experiencia de autodescubrimiento”, finalizó a modo de abrazo de bienvenida para quienes se quieran animar.
