Uno de los tantos futbolistas cedidos en el último tiempo, que debía retornar para incorporarse a la pretemporada, es Rodrigo Castillo. Pero lo curioso es que el delantero recién en la jornada de hoy se hizo presente y su aparición tardía no tuvo que ver exclusivamente con la falta de profesionalismo, sino más bien con una increíble situación que se produjo y que probablemente condicione el futuro del goleador. ¿Qué ocurrió?
Según pudo saber LAPLATA1.com, en primer lugar, Castillo fue notificado tardíamente que debía presentarse a entrenar, y por tanto, no logró llegar a tiempo al entrenamiento inicial pues se encontraba en Santa Fe. Específicamente se encontraba en Venado Tuerto, con su familia, cuando recibió el llamado el lunes por la noche. Por ello, recién el lunes logró trasladarse hacia La Plata, en donde se topó con una situación insólita.
Sucede también que Castillo percibe un salario irrisorio para el fútbol profesional, y esa es una de las principales razones a resolver, por ello, ahora no contaba con el suficiente respaldo económico como para alquilar rápidamente un inmueble. Esto motivó a que, increíblemente, sea un propio dirigente el que tenga hospedarlo momentáneamente, dado que por razones familiares hoy no está en condiciones de alojarse en la pensión del club.
Estas dos cuestiones son hoy las principales trabas para la continuidad de Castillo, considerando que desde su representación pretenden una mejora considerable, a partir del buen rendimiento que tuvo el santafesino en Deportivo Madryn. El surgido de River y de paso por inferiores de Unión, en total, disputó 33 encuentros en la Primera Nacional y marcó 12 goles. ¿Se quedará?
